El tiempo compartido

La vida
es una red infinita de caminos.
El tuyo y el mío se han encontrado,
¿cedemos el paso
al amor...

desenfrenado?
Como disfrutar
leyendo un libro,
escuchando una sinfonía, un concierto,
viendo una película...

igualmente disfruto el tiempo
compartido:
me apasiona,
me excita,
me enamora
e, igualmente, no quiero,
no, no quiero
que se acabe.
A tu lado el tiempo se detiene,
fluye bajo el suelo, apenas
perceptible un tic tac,
como una hoja suspendida
sobre el agua.
Y, al unirnos en frenesí,
el reloj se acelera y
yo me agarro a tu
cuerpo,
tú te agarras a mí.
Y nos encontramos
cada día como si fuese
el último,
pero jamás el primero
(todo suma, multiplica,
eleva nuestra relación).

Y cada hora que pasa junto a ti,
cada minuto,
cada segundo,
comprendo que nuestro tiempo,
contra el que luchamos,
con el que vivimos,
es como un motor, un
corazón que bombea
felicidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario